Acércate, Bienamada,
la de los brazos abiertos.
la de los brazos abiertos.
A ti corro enamorado
con un ciclón de deseos.
con un ciclón de deseos.
Tengo sed de tu regazo
para morir en silencio.
Amada, la presentida
desde los montes eternos,
la elegida por el Padre
para el Varón Unigénito,
eres morena de sol
y tienes olor a cedro;
desde los montes eternos,
la elegida por el Padre
para el Varón Unigénito,
eres morena de sol
y tienes olor a cedro;
yo pondré sobre tus hombros
el lino en flor de mi cuerpo
y un rojo manto prendido
con cinco rosas de fuego:
el lino en flor de mi cuerpo
y un rojo manto prendido
con cinco rosas de fuego:
¡divino traje de bodas
en el abrazo supremo!
Ven a mis brazos, Amada,
la de los brazos abiertos.
en el abrazo supremo!
Ven a mis brazos, Amada,
la de los brazos abiertos.
Bajo la noche del odio
iremos por el sendero
relampagueante de gritos
y enraizado de tropiezos:
iremos por el sendero
relampagueante de gritos
y enraizado de tropiezos:
¡que el amor siempre camina
por sendas de sufrimiento!
por sendas de sufrimiento!
Cuando estemos en la cumbre
unidos los dos y quietos,
en holocausto humeante,
transverberados de fuego,
una nueva epifanía
alumbrará tierra y cielo.
unidos los dos y quietos,
en holocausto humeante,
transverberados de fuego,
una nueva epifanía
alumbrará tierra y cielo.
Serás llamada Señora
y Madre de muchos pueblos.
y Madre de muchos pueblos.
Vendrán a ti con sus dones
los reyes del mundo entero.
los reyes del mundo entero.
Con tus brazos extendidos
serás rosa de los vientos
que conduzca caminantes
a mi Corazón abierto.
serás rosa de los vientos
que conduzca caminantes
a mi Corazón abierto.
Los que a Mí quieran venir
tendrán que amarte primero...
tendrán que amarte primero...
Salgamos ya, Bienamada,
la de los brazos abiertos.
la de los brazos abiertos.
Romancero de la Vía Dolorosa, 2a estación.
P. Benjamín Sánchez Espinoza