Balada de la placeta (fragmento)
Se ha llenado de luces
mi corazón de seda,
de campanas perdidas,
de lirios y de abejas;
y yo me iré muy lejos,
más allá de esas sierras,
más allá de los mares,
creca de las estrellas,
para pedirle a Cristo
Señor, que me devuelva
mi alma antigua de niño,
madura de leyendas,
con el gorro de plumas
y el sable de madera.
Federico García Lorca