“Me gozo en las obras de tus manos”

Salmo 91, 5.

miércoles, 30 de diciembre de 2009

Vestigios de Dios



Francisco de Asís recorría todas las etapas de la creación para encontrar en ellas vestigios de su Dios. En paz con todas las cosas, su corazón desbordaba de amor, no sólo por los hombres, sino por todo lo que camina, vuela o se arrastra. Amaba los bosques y las rocas, las cosechas y los viñedos, la belleza de los campos, la frescura de los manantiales, el verdor de los jardines, y la tierra y el fuego y el aire, y los vientos, y él exhortaba a los hombres a permanecer puros, a honrar a Dios y a servirle.


Federico Ozanam – Pensamientos sobre la vida cristiana, Sociedad San Vicente de Paul, 1951.